WORLD’S FIRST DIGITAL CRISIS CURRENCY
CCTOK - The Crisis Currency Token
Wars, pandemics, economic problems
The list of issues seems endless
Seamos honestos: ¿Cuándo fue la última vez que miraste al mundo y pensaste que todo está bien?
Guerras, pandemias, problemas económicos, la lista de problemas parece interminable. Pero mientras la mayoría de las personas solo observan y se preocupan, hay una oportunidad especial para aquellos que pueden anticipar el futuro.
¿No sería genial si existiera una especie de moneda que pudiera mantenerse fuerte en cada crisis?
¿No desplegarías las velas para aprovechar al máximo el viento? CCTOK hace eso posible – pero en lugar de utilizar el viento, aprovechamos los inevitables cambios en los eventos globales.
Nuestro Índice de Crisis Global (GCI) evalúa la intensidad de las crisis globales. Considera muchos indicadores y fuentes diferentes y los combina en una puntuación total de riesgo. Cuanto peor sea la crisis, más atención atraerá el GCI, lo que hará que el valor de CCTOK aumente. ¿Suena visionario? Nosotros también lo creemos. ¡Es mejor estar en el lado ganador cuando los tiempos difíciles se avecinan! Con el aumento de las crisis globales, también aumenta el Índice de Crisis Global, lo que conduce a una mayor atención mediática hacia nuestros informes. Esta mayor visibilidad en los medios y los periódicos resulta en una mayor demanda de CCTOK, lo que aumenta su valor comercial.
Se trata de estar preparado y obtener lo mejor de cada situación. CCTOK te ofrece la oportunidad de protegerte contra las incertidumbres de la vida y escribir un nuevo capítulo en la historia de la inversión.
La economía global es inestable. Las agitaciones políticas son cotidianas. Los desastres ambientales están aumentando. Estos problemas son reales y no desaparecerán simplemente.
No solo mires. Benefíciate de las crisis globales
Todo sobre las crisis globales en el mundo. Guerras, pandemias, problemas económicos – la lista de problemas parece interminable.
El cambio climático está destruyendo rápidamente las bases de la existencia y el sustento de toda la humanidad. Los efectos ya son visibles en muchas regiones del mundo y se pueden demostrar cuantitativamente mediante la ciencia. En muchas regiones del mundo, el cambio climático y la sequía ya están provocando una falta de hábitat fértil, haciendo imposible que las personas sobrevivan.
Muchos países sufren de alta deuda pública, aparatos estatales inflados y una economía debilitada. El riesgo de crisis económicas con recesiones marcadas siempre es alto y latente. A esto se suma una pérdida de confianza cada vez mayor en el sistema de moneda FIAT y la amenaza de crisis monetarias con desarrollo inflacionario o deflacionario. Estos desarrollos van de la mano con una gran pérdida de confianza en la política y los gobiernos impotentes.
Los movimientos globales de migración se intensifican debido a los desequilibrios económicos y las catástrofes ecológicas, y la presión para migrar a países y continentes con mejores condiciones de vida está aumentando rápidamente. En los países de inmigración, los problemas sociales están en aumento, y en los países de emigración, solo quedan los más débiles. Finalmente, la migración conduce a luchas crecientes por la distribución y desplazamiento de hábitats, recursos y capital.
El crecimiento de la población está aumentando enormemente. Desde 1800 (1 mil millones), la población mundial se ha incrementado más de ocho veces hasta 2022 (8 mil millones). Se considera probable un aumento a hasta 12 mil millones de personas para 2100. El masivo crecimiento de la población conduce a una mayor demanda de recursos y hábitat. Cada vez más personas luchan por el hábitat y los recursos que se están agotando.
Los recursos naturales y no renovables se consumen irremediablemente todos los días. El crecimiento de la población mundial y el aumento de la producción industrial hacen que el consumo de recursos siga en aumento. La demanda de materias primas seguirá aumentando hasta que las reservas naturales se agoten completamente. Esto lleva a guerras cada vez más frecuentes por los recursos y materias primas restantes.
Las diferentes amenazas se potencian mutuamente y conducen a una espiral de decadencia devastadora. Es muy probable que grandes partes del mundo se vuelvan inhabitables, mientras que la población mundial continúa creciendo masivamente. Esto, a su vez, conducirá a una migración intensificada hacia aquellas partes del mundo en las que la supervivencia aún es posible, lo que exacerbará los conflictos sociales y las emergencias ecológicas. Todos estos desarrollos conducen finalmente a un drástico aumento de conflictos sociales, guerras y terrorismo.
Los científicos advierten que el cambio climático está haciendo que huracanes como "Helene" y "Milton" sean más intensos y destructivos. Los océanos más cálidos proporcionan la energía necesaria para tormentas cada vez más fuertes, que tienen consecuencias devastadoras para las regiones afectadas.